El turismo con animales en Tailandia es uno de los mayores ingresos, sobre todo con elefantes. Este es el mayor país en Asia con estos animales en cautiverio unos 3.500, casi la misma cantidad que están en libertad, de estos alrededor de unos 1.000 son utilizados en la industria maderera y aproximadamente unos 2.500 en la industria del turismo para fines recreacionales, de este número un 70 % se encuentran en situaciones deplorables según un artículo publicado World Animal Protection.
La primera vez que vi elefantes por primera vez en mi vida fue hace menos de un año en Sri Lanka, me cercioré de encontrar lugares que garanticen que estos gigantes se encuentren en buenas condiciones, es así como visité Udawalawe National Park donde hice un safari y vi a los elefantes en su estado natural, cómo debe ser, además encontré una organización espectacular llamada Elephant Transit Home donde cuidan a elefantes huérfanos para reintroducirlos nuevamente a su habitat natural, en ambos lugares los vi a más de 50 metros de distancia y el contacto con ellos era algo imposible.
En Tailandia quise visitar una vez más a los elefantes, tenía el gran desafío nuevamente de qué lugar visitar, si uno busca en internet encuentra muchas opciones, de mi investigación solamente en Chiag Mai encontré más de 20 lugares, muchos de ellos tenían la palabra «santuario» antes o después de su nombre, pero esto no es del todo cierto ya que un lugar que te permita interactuar con animales salvajes no puede ser un espacio donde se preocupen de ellos. Los últimos año este tipos de lugares han generado una polémica muy grande sobre todo para las personas que defienden los derechos de los animales.
Así fue como encontré Elephant Project Valley Thailand, una organización que en Tailandia solamente cuenta con 2 años de creación, pero el mismo proyecto en Camboya otro país famoso por el tráfico y maltrato de elefantes cuenta ya con más 12 años de funcionamiento y un modelo ético. Su propuesta se basa en alquilar los elefantes de a circos, zoológicos y llevarlos a su espacio. Alquilar es una palabra difícil de asimilar cuando tomamos en cuenta que son seres vivos, pero los dueños al tener los papeles de propiedad de ellos pueden hacer lo que quieran de estos animales.
Elephant Project Valley Thailand, se denominan como una escuela primaria de elefantes, ya que aquí ellos tienen que reaprender a volver a ser animales «salvajes» y no depender de un humano para comer o moverse, ya que muchos de ellos han sido criados desde pequeños al rededores de personas sin sus manadas perdiendo totalmente sus instintos naturales. Estos animales tienen traumas muy grandes ya que la mayor parte de tiempo han pasado en jaulas o sometidos a trabajos forzosos, no tienen la talla ni el peso correcto ya que no alcanzaron culminar su etapa de crecimiento debido a la desnutrición. La propuesta de ellos se basa en poder mejorar las condiciones de los elefantes radicalmente y aunque estén en cautiverio porque ya no pueden ser soltados nuevamente porque morirían darles la mejor calidad de vida posible en amplios espacios verdes con correcta alimentación y dejando que ellos sean libres de hacer lo que deseen, el lugar se financia a través de los visitantes. Actualmente cuentan con seis elefantes pero esperan progresivamente acoger más elefantes haciendo que los dueños puedan cederlos a la organización y a cambio de eso se les pueda dar una mensualidad en vez de que el animal este en un circo o zoológico. Hay muchas comunidades étnicas dueñas de elefantes que los utilizan para el turismo y con este dinero subsisten ¿Pero que pasaría si recibieran la misma cantidad y los elefantes podrían estar en un entorno mas saludable? La verdad que no hay mucho que pensar en esa decisión.
Mi tour comenzó a las 8h30 cuando una camioneta de la organización me fue ver al hotel, llegamos al campo donde recibimos las instrucciones de seguridad, no gritar ya que estos animales tienen un oído muy agudo y eso les puede perturbar, no va a ver ningún contacto con el animal bajo ningún contexto excepto al final del tour donde por cinco minutos les das un snack a través de unas barandas de madera que te alejan de ellos. Estuvimos durante dos o tres horas caminado y viendo a estos gigantes a una distancia de 20 a 25 metros, vimos también como los bañaban. Se veían felices y sobre todo tranquilos. Me fui del lugar contenta de conocer una propuesta diferente y que realmente está impactando y transformando la vida de estos animales que estuvieron sometidos a trabajos forzosos y maltratos durante muchos años de sus vidas. de manera injusta.
¿Cómo elegir un buen lugar?
Cristina Palacio Subdirectora de Elephant project valley in Thailand nos comenta que ningún campamento o santuario que te permita interactuar con los elefantes es un lugar que se preocupa por ellos, los humanos les generan estrés, ellos no son animales domésticos, no es normal que un elefante cargue en sus lomos a personas, que se dejen acariciar o que quieran jugar al futbol contigo, detrás de eso hay mucha violencia que quizás no la podemos ver pero existe, eso sale de sus patrones naturales e impide que puedan actuar de manera natural y sean forzados hacer «tiernos» por miedo hacer golpeados.
Así que si tu vas a visitar un lugar con elefantes o con cualquier tipo de animales te invito a que tomes una decisión responsable y no seas parte del círculo de violencia y abuso.
Cuanto cuesta y donde se ubica Elephant Project Valley in Thailand
Está ubicado a las afueras de Chiang Rai, el lugar cuesta 1.400 baths $42 por el medio día o 1800 baths $55 por el día completo, incluye el transfer ida y vuelta al hotel dentro de la ciudad, almuerzo, agua, té o café.
Otros santuarios con ética animal
Kindred Spirit Elephant Sanctuary (Chiang Mai)
Boon Lott´s Elephant Sanctuary (Sukhothai)
